En octubre celebramos al adulto mayor.
Envejecer es un privilegio. Es llegar a una etapa en la que el tiempo se vive con calma, los logros se disfrutan con orgullo y la experiencia se convierte en guía. Ser una persona adulta mayor hoy significa mucho más que alcanzar cierta edad: es abrir un capítulo lleno de oportunidades, bienestar y tranquilidad.
Cada vez más, vemos cómo esta etapa se transforma en una época de plenitud. Las personas disfrutan de su tiempo libre, priorizan su salud, fortalecen sus vínculos y redescubren intereses que antes quedaban postergados. Lejos de los antiguos estereotipos, la adultez mayor se asocia con calidad de vida, equilibrio y nuevas metas personales.
Sin embargo, disfrutar de esta etapa con serenidad requiere algo fundamental: haber planificado con anticipación. Construir una base financiera sólida es lo que permite vivir el retiro con seguridad, independencia y bienestar.
En Vida Plena creemos firmemente que cada aporte cuenta. Detrás de cada ahorro hay un propósito: garantizar que el futuro se viva con la tranquilidad que todos merecemos. Por eso existen fondos de pensión obligatoria y voluntaria, para que cada persona decida, según sus condiciones y expectativas, cómo asegurar una adultez mayor plena, activa y feliz.